OpenAI publicó su estudio más completo hasta la fecha sobre el uso de ChatGPT, ofreciendo una radiografía detallada de quiénes lo utilizan, para qué y cómo se expande la herramienta en el mundo. El análisis, realizado junto al economista de Harvard David Deming y difundido por el National Bureau of Economic Research, procesó 1,5 millones de conversaciones de entre los 700 millones de usuarios semanales de la plataforma.
De mayoría masculina a paridad de género
Uno de los hallazgos más sorprendentes es el cambio en la composición demográfica. En los primeros días de ChatGPT, los hombres representaban hasta el 80% de los usuarios. Sin embargo, para julio de 2025 las mujeres pasaron a ser mayoría, con el 52% de participación.
La transformación fue rápida: en enero de 2024 solo el 37% de los usuarios con nombres identificables eran típicamente femeninos. Para Ronnie Chatterji, economista jefe de OpenAI, este giro refleja cómo la plataforma dejó de ser un espacio dominado por los primeros entusiastas tecnológicos para convertirse en una herramienta cotidiana con usos más amplios y prácticos.
Qué hacen los usuarios con ChatGPT
El estudio muestra que el 80% de las interacciones se concentran en tres grandes categorías:
- Orientación práctica
- Búsqueda de información
- Asistencia en la escritura
A diferencia de la percepción de que la IA generativa está mayormente vinculada a la programación, esta representa solo una pequeña fracción del uso. En cambio, la escritura laboral y personal aparece como la aplicación más frecuente, subrayando la ventaja de ChatGPT para producir resultados digitales frente a motores de búsqueda tradicionales.
Los datos también revelan que alrededor del 30% del uso está relacionado con actividades profesionales, mientras que el 70% ocurre fuera del ámbito laboral, un patrón que sigue en expansión.
Crecimiento más rápido en países en desarrollo
La investigación resalta que ChatGPT no solo se consolida en países ricos, sino que está creciendo aún más rápido en las economías de menores ingresos. En mayo de 2025, la tasa de adopción en estos países era cuatro veces superior a la de las naciones de altos ingresos.
Este fenómeno sugiere que la herramienta pasó de ser vista como un “lujo tecnológico” a una infraestructura digital esencial, ampliando su alcance en comunidades donde el acceso a recursos educativos y profesionales es más limitado.
Una primera mirada empírica a gran escala
Para llevar a cabo el estudio, los investigadores utilizaron herramientas automatizadas que permitieron categorizar patrones de uso sin revisar de manera humana los mensajes individuales, garantizando la privacidad de los usuarios.
El resultado es la primera visión empírica y a gran escala sobre cómo la inteligencia artificial generativa se usa en la práctica, ofreciendo un contrapunto a las especulaciones teóricas sobre sus impactos.